Aunque los respiradores y las mascarillas quirúrgicas se utilizan para protegerse del contagio de enfermedades, existen algunas diferencias importantes entre ellos. A continuación, vamos a explicar en qué se diferencian estos dos tipos de dispositivos de protección.
¿Qué es lo que las diferencia?
En primer lugar, la principal diferencia entre los respiradores y las mascarillas quirúrgicas reside en el nivel de protección que ofrecen. Los respiradores tienen una protección mucho mayor que las mascarillas quirúrgicas. Los respiradores se utilizan para filtrar el aire, mientras que las mascarillas quirúrgicas tienen el objetivo de evitar que el usuario toque su boca y nariz con sus manos.
Otra diferencia entre los respiradores y las mascarillas quirúrgicas es el diseño. Los respiradores se ajustan a la cara de manera hermética para filtrar el aire, mientras que las mascarillas quirúrgicas son más simples y se ajustan al contorno de la cara sin ofrecer un sellado hermético. Además, los respiradores están disponibles en varios tamaños para adaptarse a diferentes caras.
Por último, los respiradores tienen una vida útil más larga que las mascarillas quirúrgicas. Los respiradores pueden ser reutilizados varias veces si se lavan y desinfectan adecuadamente, mientras que las mascarillas quirúrgicas se deben desechar después de un solo uso.
¿Para qué se usan?
Los respiradores se utilizan principalmente en entornos laborales, como en hospitales y laboratorios, donde la exposición a sustancias infecciosas es elevada. Estos respiradores se conocen como respiradores de partículas y están diseñados para filtrar el aire y evitar el contagio por enfermedades infecciosas.
Las mascarillas quirúrgicas, por otro lado, se utilizan principalmente para minimizar el riesgo de infección en entornos médicos. Estas mascarillas también se utilizan para evitar la propagación de enfermedades infecciosas en entornos no médicos, como el transporte público y los centros comerciales.
En conclusión, los respiradores y las mascarillas quirúrgicas son dispositivos de protección muy útiles. Sin embargo, existen algunas diferencias esenciales entre ellos, como el nivel de protección, el diseño, la vida útil y el propósito para el que se utilizan. Es importante entender estas diferencias para elegir el dispositivo correcto para cada situación.